
Ruta circular por caminos forestales y senderos hasta el monasterio de Sant Llorenç del Munt. Desde allí se continúa el camino hasta el Salt de la Minyona, un bonito mirador que se encuentra en la cima dels Munts y desde donde se pueden observar unas magníficas vistas de las Guilleries. Subiendo por el antiguo camino de Sau, llega al misterioso pozo de Llitons, justo a una bifurcación de caminos y bajo un pequeño y disimulado puente: el Puente de la "Bruixa". Un magnífico lugar para disfrutar de la naturaleza. La última parte del recorrido lleva a las ruinas ibéricas de Can Barretina y Puig Castellet.